La respiración para controlar la ansiedad

La ansiedad es una respuesta normal frente a la aprensión, la indefensión y los pensamientos negativos.

Por otra parte, la ansiedad activan síntomas físicos como por ejemplo la problemas respiratorios, taquicardia, debilidad, sudor, nauseas, etc.

Si la ansiedad ha ganado tu vida, con ciertas técnicas de respiración puedes reducirla y controlarla.

¿Cómo respirar para controlar la ansiedad?

• Siéntate en un lugar cómodo.
• Relaja todo el cuerpo los brazos, las piernas, el tronco y la cabeza.
• Una vez hecho esto, coloca una mano sobre la boca del estómago y toma aire lentamente (por 3 segundos).
• Se consciente de cómo tus pulmones se llenan de aire. La concentración es muy importante para ello. Siente que el vientre se hincha.
• Mantén el aire dentro de tus pulmones contando hasta tres.
• Expira el aire en forma lenta por la boca. Tardarás alrededor de 4 segundos, hasta que sientas que has vaciado tus pulmones, y tu vientre se ha deshinchado.
• Repite está técnica en tres oportunidades.

Esta técnica respiratoria puede ser una autoayuda importante, no sólo para controlar la ansiedad, cuando esta se haya presentado; sino que también puede serte útil para prevenirla.

Para prevenir la ansiedad, puedes realizar esta respiración cuando te despiertas. Elije un lugar tranquilo y acogedor. Incluso, puedes realizar esta técnica 3 a 4 veces al día o cuando sientes que lo necesitas.

Existen muchas técnicas de autoayuda para calmar la ansiedad, como por ejemplo ejercicios, trucos o sugerencias que pueden ser de gran utilidad para que te sientas menos ansioso y recobres tu equilibrio emocional.

Recuerda que, la ansiedad que no se puede controlar puede ser perjudicial para la salud, no sólo psíquica sino también física. Por ello, ante los primeros síntomas pide ayuda familiar y médica para que juntos puedan ayudarte a reducir y controlar la ansiedad que te aqueja.