Una ruta enológica o un fin de semana de cuidados de salud y estética son algunas de las últimas alternativas de moda

Actualmente, disfrutar de una ruta enológica o pasar un fin de semana inmerso en cuidados de salud, son algunas de las últimas alternativas que más se demandan en las agencias de viaje.

El turismo está cambiando y lo demuestran las peticiones que se realizan en las agencias de viajes en la actualidad. Ahora, viajar ya no es un lujo y se aprovecha cualquier periodo, por muy corto que sea, para realizar una escapada. De esta forma, las nuevas formas de hacer turismo provocan que el sector haya de adaptarse a una serie de cambios imparables que les obligan a replantearse las estrategias futuras de actuación.

Si además sumamos el impacto de internet y las nuevas formas de contratación de los viajes, vemos que con ello aumenta la capacidad de maniobra del turista que busca una escapada inmediata y rápida, sin más intermediarios, lo que acelera la transacción y obliga a la agencia a dar una respuesta inmediata a esta necesidad. Pues bien, el turismo de salud y bienestar ya no es una opción para privilegiados y los balnearios se llenan de turistas ávidos de un tratamiento antiestresante, adaptado a sus necesidades.

Acudir a un balneario hoy en día ya no es sinónimo de enfermedad, sino de bienestar y de salud. Actualmente, los diversos tratamientos, spas, talasoterapia e incluso servicios de belleza se encuentran al alcance de todos los bolsillos y además se pueden realizar en periodos cortos con lo que no es necesario contar con un tiempo adicional, mayor a un fin de semana. Así, los balnearios han pasado de ser centros de tratamiento de diversas dolencias a convertirse en auténticos centros de salud para toda la familia. Además, las grandes cadenas hoteleras se han sumado y ya incluyen estos servicios en sus respectivas ofertas.

Otra alternativa muy seguida es la de realizar una escapada para cubrir una determinada ruta enológica, que actualmente se encuentra al alcance de cualquier persona. Así, el enoturismo es otra de las opciones que no ha parado de crecer, ya que la mayoría de regiones vinícolas han potenciado esta opción y ya ofrecen rutas y catas por sus bodegas a quiénes no se conforman con cualquier cosa. Además, el atractivo de estas rutas se complementa con itinerarios gastronómicos y estancias en alojamientos rurales, que hacen las delicias de los más exigentes.